La boda en la Iglesia Espíritu Santo, en Ronda

13 Mar La boda de María y Víctor en la Iglesia Espíritu Santo, en Ronda

Escrito a las 18:50h en Bodas reales, Destacados por melohapedido 0 Comentarios

Después de un tiempo bastante largo, un poco out por falta de tiempo, ¡vuelven las bodas al blog! Y en esta ocasión os enseño un trocito de la boda de María y Víctor celebrada en Ronda. María y Víctor se casaron en la Iglesia Espíritu Santo, en Ronda, y posteriormente, lo celebraron en la finca familiar del novio, de Víctor.

Siempre que puedo, me gusta trasladaros las palabras de la novia tal cuál ella me lo contó a mí, así que así voy a hacer esta vez. A continuación podéis leer lo que María me ha contado de su boda 🙂

Fijamos nuestra boda para el 4 de julio de 2020, pero la pandemia cambió nuestros planes, y enseguida decidimos aplazarla al 26 de junio de 2021. Para nosotros fue la mejor decisión. Ese año de espera nos enseñó a adaptarnos a los cambios y valorar las pequeñas cosas; y después de todo, tuvimos la mejor boda que pudimos imaginar.

Para mi vestido de novia, Antonio García captó lo que quería al instante. Sobre la marcha dibujó el que sería mi vestido. Un cuerpo de microfalla ceñido con costuras, escote bardot y espalda abotonada hasta el suelo. Unas mangas efecto volante de organza de seda, y una sobrefalda de 3 metros desmontable en la misma tela.

Me sorprendió que en cuestión de minutos fuera capaz de reorganizar mis ideas y plasmarlo en un papel. Me enseñó telas, me probó vestidos de su colección para que viera cómo me sentaban los distintos tipos de faldas, y salí de allí una hora después sabiendo que sería él el diseñador de mi vestido.

Víctor, el novio, llevó un chaqué azul marino de Hugo Boss y gemelos de Suárez, regalo de su hermano gemelo. Fueron los 4 hermanos de chaqué.

Mi madre llevó un vestido color berenjena de Escada y un mantón de manila antiguo color marfil. Mi hermana llevó un vestido plisado de Purificación García.

Los niños de arras iban de La Bube, con un precioso tocado de paniculata que hicieron las chicas de Anais Floristas. Llevaron el saquito de arras y el cojín de alianzas de Villalegría.

De la peluquería y maquillaje se encargó Eli, de Oui novias Málaga. Me entendió a la perfección. No estoy acostumbrada a maquillarme y quería algo natural. Llevé una coleta ondulada, el peinado favorito de Víctor, y un tocado de hojas de tela de Buffuna Hats.

En cuanto a los zapatos, elegí el modelo Philippa personalizado de Flor de Asoka, en terciopelo color marfil y tacón dorado de 8 cm. Fueron comodísimos.
Para la ceremonia llevé unos pendientes antiguos de mi abuela María, tipo rosetón en oro blanco y diamantes en talla brillante. Siempre me habían encantado, y me hacía ilusión llevar algo suyo el día de mi boda. También llevé mi anillo de pedida, un solitario de la Joyería Suarez.

Queríamos darlo todo, así que para el baile, me quité la sobrefalda, el velo y el tocado. También cambié los pendientes, por unos largos de Óscar de la Renta. Los vi y fue un flechazo total.

– Invitación, detalles y elementos de papelería

Bea Arcelus se encargó de toda la papelería de la boda. Nuestra invitación era personalizada con ilustraciones de botánica, detalles a caligrafía, y dibujos a plumilla. Elegimos los sobres artesanales de algodón color blanco roto y lacre color marfil.

También se encargó del seating, los meseros, las minutas y los detalles a los invitados.

– Regalos de los invitados

Nuestro detalle a los invitados fue unas libretas con ilustraciones de botánica a conjunto con toda la papelería. Además pusimos un rincón con chanclas para que el dolor de pies no fuera excusa para no darlo todo.

– Ramo de flores, Decoración, Candy bar, etc.

Anais floristas se encargó de toda la decoración floral. El ramo era de rosas blancas spray, sencillo y silvestre, como yo quería, con un lazo de la misma organza de seda del vestido.

La decoración floral de la finca fue muy colorida, a base de eucalipto, proteas fucsias, rosas spray blancas, cardo azul, astrantia morada, tranchelium y tanacetum.

Ainhoa & co nos trajo una impresionante barra de cobre con lámparas de flecos, mobiliario chill-out y un seating con puertas antiguas precioso.

Elegimos sillas de ratán, mantelería blanca y copas verdes labradas.

En el cóctel pusimos un rincón de coctelería cubana, y otro de especialidades árabes, aparte de los clásicos de jamón y queso. Vino una cantante cubana que fue un exitazo, nadie quería pasar a la zona de mesas.

Grupo Ej eventos, se encargó del montaje de iluminación, un techo de bombillas microled espectacular y focos de ambiente que dieron color a toda finca; y en la fiesta, Smartsound, se encargó del montaje de sonido y Dj.

Pusimos un Fotomatón de Risbox, que nunca falla.

Lo dimos todo, nos hacía falta desconectar y disfrutar todos juntos. Había familiares que no veíamos desde las navidades de 2019. No paramos de sonreír en todo el día, y esa felicidad la vemos ahora en nuestras fotos, en todos y cada uno de nuestros invitados. A veces los cambios no sólo son necesarios, sino imprescindibles para que las cosas salgan aun mejor.